Periodista

Mi inicio en el periodismo se sitúa en 1996. Ese año, dentro del traumático «Periodo Especial» que vivía Cuba, con Ileana Álvarez y otros amigos intelectuales fundamos Imago, revista de la diócesis de Ciego de Ávila. Se imprimía en el obispado cada tres meses y podía adquirirse por cualquier ciudadano en las parroquias, lo que significaba un desafío para el control estatal.

Empecé a colaborar en 1998 con Videncia, revista cultural de la que llegué a ser editor y director editorial. 

Árbol Invertido, título de un poema de Ileana, fue el nombre que escogí para la revista independiente iniciada en 2005, con este lema (verso final del mismo texto): «¡Ah, verlo todo distinto!». Se distribuía a veces impresa, a veces por correo electrónico, hasta que creamos el sitio web.

Abrí mi blog personal Hombre en las nubes en 2010 para informar y opinar libremente.

Acompaño desde el primer día a Ileana Álvarez en la realización de la revista feminista Alas Tensas.


CRÓNICAS:

«Como si el corazón del capitalismo estuviese allí»

«Ceballos, The Gardem»

«Una pelea cubana contra el hastío»

«Donde antes estuvo el telón de acero»


OPINIÓN:

«La crisis de la baja cultura»

«Velando nuestro cadáver»

«El preso y la luz»


ENTREVISTAS:

«Salvador Bueno: un sillón ocupado en las letras cubanas»

«La palabra en el corazón de Maricruz Patiño»

«Los poetas siempre vuelven. Entrevista a Raúl Tápanes»


Currículo de Francis Sánchez.



Opiniones

Norges Espinosa
Escritor

«Palabras que se hilvanan a través de sonetos, décimas […] y de un verso libre que gana sus mejores momentos en poemas tan ceñidos y seguros de su humildad».

«La poesía de Francis Sánchez es una revelación dentro de las letras cubanas, y una voz que viene a sumarse a las grandes voces jóvenes en el ámbito internacional».

«Poesía que entronca directamente con la gran poesía del siglo de oro español, de una riqueza rítmica y expresiva impresionante. Poesía que muestra muy a las claras un vasto conocimiento de la literatura clásica, hispana y no hispana […] que otorga —y exige— a cada poema una lectura detenida y pausada».

Otras opiniones